La cultura es la culpable

Hoy en día la mayor parte de nuestra lucha para ser verdaderos padres de familia se debe a la cultura en que vivimos. En realidad esta cultura está marcada por una creciente propagación de conducta inmoral que debilita la vida familiar. Está compuesta de costumbres, tradiciones, arte, música, lenguaje, literatura e instituciones; con todo lo que tiene, nos seduce al punto que terminamos, consciente e inconscientemente, adoptando una serie de antivalores. Ya las familias no se comunican cara a cara. Papá, mamá e hijos se comunican a través de un mensajito de texto cuando están sentados en la mesa donde se supone están compartiendo la cena. La cultura es la culpable pues esta nos enseñó a engendrar hijos más no a criarlos. Los hemos ido formando a rajatablas, a puro ensayo y error, con tal que fueran personas de bien. Quizá por eso vivimos en una sociedad descompuesta y putrefacta. Tarde comprendimos lo que significa ser padre y de lo que significa el amor por un hijo....